Almohadilla térmica infrarroja lejana: cómo puede ayudarle a recuperarse de una lesión mientras está en casa
¿Qué es la radiación infrarroja lejana o FIR?
La historia del tratamiento: La radiación infrarroja lejana (FIR) utiliza ondas de luz muy específicas a lo largo del espectro electromagnético. Todos los seres vivos de la Tierra están expuestos a partes del espectro electromagnético a diario. La radiación solar, que forma parte del espectro electromagnético, llega a la Tierra a diario, y sin ella, ¡la vida en la Tierra no existiría! Los rayos solares son potentes y permiten que las plantas y otros organismos crezcan, se curen y se nutran. Sin embargo, la sobreexposición a los rayos solares puede causar daños, como quemaduras solares o cáncer de piel. Por lo tanto, es fundamental controlar la dosis y la potencia de las ondas electromagnéticas, incluidas las ondas infrarrojas lejanas, y que se mantengan dentro de una longitud de onda específica del espectro.
La ciencia detrás del tratamiento: La luz se compone de rayos ultravioleta, luz visible (la que nuestros ojos pueden ver) y luz infrarroja, que cae justo después de la luz roja visible en el espectro… ¡de ahí el nombre de infrarrojo! La ciencia ha determinado que la luz específica del espectro infrarrojo tiene propiedades curativas. Recientemente, los procesos de fabricación han permitido a las empresas desarrollar tecnología que permite fabricar diodos o fibras especiales que emiten radiación infrarroja lejana (FIR) pura e inocua, que se aplica a través de la piel humana de forma controlada, segura y eficaz. De este modo, las personas que sufren dolor debido a una lesión pueden reducir significativamente el dolor asociado y acelerar su recuperación.
Efectos biológicos del tratamiento: La radiación infrarroja lejana, utilizada en el Centro de Atención de Lesiones, se logra típicamente mediante el uso de una almohadilla térmica FIR que se proporciona para un uso seguro, efectivo y controlado en el hogar como complemento a la atención médica formal, incluyendo fisioterapia o quiropráctica. La almohadilla está impregnada con diodos especiales que producen esta onda de luz... pero recuerde, no puede verla a simple vista, ya que no está en el espectro visible. Este sistema proporciona un componente de calor a los tejidos lesionados, como tirones musculares, esguinces, distensiones, hernias discales sufridas en un accidente automovilístico o una lesión laboral, por ejemplo. La diferencia entre usar esto y una almohadilla térmica eléctrica "ordinaria" es doble. Una almohadilla térmica infrarroja lejana penetra mucho más profundamente (2,36 pulgadas) debajo de la piel para ayudar a sanar donde tiende a estar la lesión y lo hace a una temperatura superficial más baja. La mayoría de las almohadillas térmicas eléctricas del mercado calientan solo la capa de la piel, sin llegar a los músculos más profundos. Suelen alcanzar los 130 grados, lo que aumenta el riesgo de quemaduras en la piel con las almohadillas térmicas eléctricas comunes. El calor más profundo que proporciona una almohadilla térmica FIR no suele superar los 112 grados en la superficie de la piel, lo que reduce el riesgo de quemaduras. Además, la FIR proporciona un alivio más duradero, que en muchos casos puede durar hasta seis horas después del tratamiento.
¿Qué afecciones puede tratar la radiación infrarroja lejana (FIR)?
La radiación infrarroja lejana (FIR) se puede utilizar para tratar el dolor asociado con: dolor de cuello, lumbalgia, dolor de hombro, dolor de cadera y dolor de rodilla. Además, se tratan esguinces y distensiones, tendinitis, tendinosis, ciática, fascitis plantar, neuropatía, DSR, epicondilitis, hernia discal y bursitis, entre muchas otras afecciones. Diversos estudios científicos avalan la eficacia de la radiación infrarroja lejana (FIR), incluyendo estudios del Instituto Nacional de la Salud (NIH) que promocionan sus efectos biológicos y aplicaciones médicas. Por lo tanto, las almohadillas térmicas de radiación infrarroja lejana (FIR) han demostrado ser seguras y eficaces para diversas afecciones médicas y son una técnica de tratamiento registrada por la FDA para su uso en Estados Unidos.
¿Existen precauciones al utilizar la radiación infrarroja lejana (FIR)?
Cada paciente debe ser evaluado por un profesional médico colegiado antes de usar FIR. La almohadilla térmica FIR debe ser prescrita por su médico y se deben tomar todas las precauciones necesarias. Las precauciones son similares a las que se aplican cuando el calentamiento de una zona está contraindicado. Además, a diferencia del láser, la energía luminosa emitida por una almohadilla térmica FIR es segura y no representa ningún riesgo para la vista.
La almohadilla térmica FIR es un tratamiento seguro y eficaz comprobado que muchos pacientes consideran un medio eficaz para controlar el dolor de sus lesiones mientras están en casa sin preocuparse por los riesgos de quemaduras ni los efectos secundarios de ciertos medicamentos para controlar el dolor.
UTK Technology, fabricante líder de almohadillas térmicas de jade y turmalina de infrarrojo lejano para el alivio del dolor y el cuidado de la salud. Nuestras almohadillas térmicas están registradas por la FDA como Dispositivo Médico Clase II y cuentan con la certificación CE/FCC/RoHS.
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